Las redactoras del PXOM de Lugo dicen que el Concello les pidió recalificar fincas
04/02/2011 - Miguel Olarte / El Progreso
Las dos arquitectas redactoras del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) declararon ayer como testigos en el juzgado de Instrucción número 2 de Lugo, que investiga una denuncia de una asociación por supuestas irregularidades en las recalificaciones contempladas en dicho plan. Según las fuentes consultadas por este diario, ambas habrían declarado que recibieron indicaciones del Concello sobre determinados terrenos y zonas de urbanización, y en especial sobre los terrenos de San Lázaro de A Ponte donde tiene una fina en propiedad el ex concejal y actual presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño, Francisco Fernández Liñares.
Este juzgado ha iniciado diligencias tras la denuncia presentada por la asociación de propietarios de terrenos Alpul. Se trata de establecer si realmente hay indicio de delitos y, en su caso, quién sería el responsable. Al parecer, la jueza decidió unir a la causa la investigación sobre una denuncia que presentó hace años, en el número 1 de Instrucción, otra asociación sobre la recalificación de la finca propiedad de Liñares. Se trata de la Asociación de Defensa del Parque de Rosalía, que de este modo se personó en la investigación que se sigue en el juzgado número 2.
Ayer su representante legal y el de Alpul estuvieron presentes en la toma de declaración a las dos arquitectas madrileñas que han redactado el PXOM, aprobado provisionalmente en diciembre pasado. El Concello no se ha personado todavía en este asunto, aunque tiene previsto hacerlo en breve.
Las dos arquitectas prestaron declaración como testigos por espacio de dos horas cada una. El mayor interés de la jueza Natalia Paz y de los abogados giró en torno a los terrenos de Bosende, de Fixós (los que afectan al Club de Golf) y a la clasificación de los bordes urbanos, en especial los de San Lázaro de A Ponte.
A este respecto, el letrado de la Asociación en Defensa del Parque de Rosalía se interesó por el motivo de que el nuevo PXOM declare como finca urbana consolidada una propiedad de Liñares y no lo haga con las de enfrente. La recalificación contó en su momento con un informe en contra de la Xunta, ya que no reunía las condiciones (acceso asfaltado, alcantarillado, luz...), si bien posteriormente los técnicos municipales emitieron un informe a favor en el que declaraban subsanados los problemas.
A esta pregunta, a parecer, las redactoras del PXOM respondieron que recibieron la indicación del Concello para que se hiciera así, y reconocieron que no acudieron a comprobar in situ si los terrenos cumplían o no las condiciones, sino que se fiaron de los informes municipales.
Y no sólo en ese caso: ambas especificaron, según las fuentes consultadas, que durante la elaboración del plan urbanístico recibieron numerosas indicaciones por parte de los responsables municipales que ellas se limitaban a cumplir si encajaban dentro de la legalidad. El argumento que esgrimieron para no comprobar sobre el terreno los detalles en todas las ocasiones fue que redactar el PXOM es un trabajo enorme y no podían desplazarse a Lugo constantemente.
El interrogatorio también incluyó otros asuntos menos específicos. Por ejemplo, se les pidió a las redactoras que explicaran algunos puntos del informe de la Consellería de Infraestructuras en el que se solicitaba la modificación de algunas deficiencias encontradas en el plan urbanístico.
También tuvieron que responder a cuestiones acerca de las diferencias entre el documento previo elaborado en 2006 y el que finalmente de aprobó por parte del pleno el pasado diciembre, pendiente del visto bueno de la Xunta para pasara a definitivo.
04/02/2011 - Miguel Olarte / El Progreso
Las dos arquitectas redactoras del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) declararon ayer como testigos en el juzgado de Instrucción número 2 de Lugo, que investiga una denuncia de una asociación por supuestas irregularidades en las recalificaciones contempladas en dicho plan. Según las fuentes consultadas por este diario, ambas habrían declarado que recibieron indicaciones del Concello sobre determinados terrenos y zonas de urbanización, y en especial sobre los terrenos de San Lázaro de A Ponte donde tiene una fina en propiedad el ex concejal y actual presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño, Francisco Fernández Liñares.
Este juzgado ha iniciado diligencias tras la denuncia presentada por la asociación de propietarios de terrenos Alpul. Se trata de establecer si realmente hay indicio de delitos y, en su caso, quién sería el responsable. Al parecer, la jueza decidió unir a la causa la investigación sobre una denuncia que presentó hace años, en el número 1 de Instrucción, otra asociación sobre la recalificación de la finca propiedad de Liñares. Se trata de la Asociación de Defensa del Parque de Rosalía, que de este modo se personó en la investigación que se sigue en el juzgado número 2.
Ayer su representante legal y el de Alpul estuvieron presentes en la toma de declaración a las dos arquitectas madrileñas que han redactado el PXOM, aprobado provisionalmente en diciembre pasado. El Concello no se ha personado todavía en este asunto, aunque tiene previsto hacerlo en breve.
Las dos arquitectas prestaron declaración como testigos por espacio de dos horas cada una. El mayor interés de la jueza Natalia Paz y de los abogados giró en torno a los terrenos de Bosende, de Fixós (los que afectan al Club de Golf) y a la clasificación de los bordes urbanos, en especial los de San Lázaro de A Ponte.
A este respecto, el letrado de la Asociación en Defensa del Parque de Rosalía se interesó por el motivo de que el nuevo PXOM declare como finca urbana consolidada una propiedad de Liñares y no lo haga con las de enfrente. La recalificación contó en su momento con un informe en contra de la Xunta, ya que no reunía las condiciones (acceso asfaltado, alcantarillado, luz...), si bien posteriormente los técnicos municipales emitieron un informe a favor en el que declaraban subsanados los problemas.
A esta pregunta, a parecer, las redactoras del PXOM respondieron que recibieron la indicación del Concello para que se hiciera así, y reconocieron que no acudieron a comprobar in situ si los terrenos cumplían o no las condiciones, sino que se fiaron de los informes municipales.
Y no sólo en ese caso: ambas especificaron, según las fuentes consultadas, que durante la elaboración del plan urbanístico recibieron numerosas indicaciones por parte de los responsables municipales que ellas se limitaban a cumplir si encajaban dentro de la legalidad. El argumento que esgrimieron para no comprobar sobre el terreno los detalles en todas las ocasiones fue que redactar el PXOM es un trabajo enorme y no podían desplazarse a Lugo constantemente.
El interrogatorio también incluyó otros asuntos menos específicos. Por ejemplo, se les pidió a las redactoras que explicaran algunos puntos del informe de la Consellería de Infraestructuras en el que se solicitaba la modificación de algunas deficiencias encontradas en el plan urbanístico.
También tuvieron que responder a cuestiones acerca de las diferencias entre el documento previo elaborado en 2006 y el que finalmente de aprobó por parte del pleno el pasado diciembre, pendiente del visto bueno de la Xunta para pasara a definitivo.
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