Varias causas xudiciais abertas e centos de imputados e testigos chamados a declarar. Esa é a realidade desde hai anos na cidade de Lugo. En todas elas un denominador común: políticos e empresarios baixo sospeita de supostos delitos de corrupción. Na convicción de loitar contra o silencio, contra a omertá declarada ao respecto por algúns partidos, Esquerda Unida alza a voz para loitar contra esa lacra social que é a corrupción.

lunes, 19 de noviembre de 2012

LIÑARES DEJARÁ LA CELDA «VIP» PARA IRSE A BONXE

Xosé Carreira lugo / la voz  
19 de noviembre de 2012

El único encarcelado en el marco de la operación Pokémon, Francisco Fernández Liñares, tendrá que hacer mudanza. La jueza que se ocupa de la instrucción ha solicitado a Instituciones Penitenciarias que lo ingrese en la cárcel de Bonxe.

Hasta ahora, Liñares había permanecido en lo que algunos denominaban zona vip de la prisión de Monterroso. Se trata del lugar destinado a miembros y cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que se encuentra separado del destinado al resto de los reclusos. Aún no teniendo dicha condición, el exconcejal lucense y expresidente de la Hidrográfica Miño-Sil acabó en esa zona.

Ahora, la jueza decidió mover ficha y pedir que el preso deje ese lugar y pase a la prisión de Bonxe. En su momento había decidido su envío a Monterroso para que no coincidiera en la otra penitenciaría lucense con Gervasio Rolando Rodríguez Acosta, el gerente de Vendex. La magistrada trataba de evitar el contacto a toda costa entre ambos. Ahora ya no existe ese peligro porque la Audiencia puso en la calle a uno de los que parece ser clave en la operación por 80.000 euros. Rodríguez Acosta está libre desde mediados de la pasada semana.

Hasta ahora no hay constancia de que fuese presentado recurso de ningún tipo para pedir la liberación de Fernández Liñares, que es el único que se encuentra entre rejas.

El exedil lucense salió al menos en tres ocasiones de prisión para participar en declaraciones ante la instructora y no es descartable que vuelva a hacerlo en lo sucesivo. Según algunas fuentes, tendría que dar explicaciones sobre diversas adjudicaciones, entre ellas la de la explotación de una minicentral eléctrica que en Lugo se conoce como la fábrica de la luz.

Los investigadores tratan de determinar si la empresa adjudicataria de la concesión tenía algo que ver con uno de los socios de Liñares. Pero, además, también indagan cómo fue el proceso de solicitud de impacto ambiental porque en su momento la adjudicataria pidió un aumento de caudal para poder producir energía, concretamente planteaba pasar de 7.000 a 18.000 litros, lo que podría causar un gravísimo impacto en una zona de la ciudad donde se encuentra el Club Fluvial. En su momento esta petición ya había sido muy criticada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario