Varias causas xudiciais abertas e centos de imputados e testigos chamados a declarar. Esa é a realidade desde hai anos na cidade de Lugo. En todas elas un denominador común: políticos e empresarios baixo sospeita de supostos delitos de corrupción. Na convicción de loitar contra o silencio, contra a omertá declarada ao respecto por algúns partidos, Esquerda Unida alza a voz para loitar contra esa lacra social que é a corrupción.

viernes, 19 de abril de 2013

LA JUEZA PILAR DE LARA INDAGA SI LIÑARES COBRÓ POR CONCEDER LA GRÚA DE LUGO
La instructora de la «Pokémon» imputó a la empresa Cechalva por el presunto pago de comisiones

X. C. / La Voz  
18 de abril de 2013

La jueza instructora de la operación Pokémon imputó a la empresa Cechalva, entre otras razones, por el presunto pago de comisiones para la consecución del servicio de la grúa municipal que tiene actualmente en la capital lucense. Ayer prestó declaración uno de los administradores de esta firma que fue inicialmente creada en Asturias y que, posteriormente, trasladó su domicilio social a Lugo.

La documentación intervenida en su día por los investigadores en la empresa revela la existencia de presuntos pagos por la concesión. Incluso fueron hallados documentos que hacen referencia a el «Cura» (dentro de la baraja de personajes de la presunta trama casi todos tenían un mote) y otros se refieren a cómo consiguieron el contrato en Lugo. Uno de los creadores de la firma supuestamente manifestó ante la magistrada Pilar de Lara Cifuentes, que se había establecido un acuerdo según el cual tenían que pagarle 2.000 euros mensuales, mientras durase la concesión, al exconcejal lucense y expresidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Fernández Liñares. Este hombre, cuyo abogado reclama ahora que sean declaradas nulas muchas de las actuaciones, está considerado como un personaje clave en todo el entramado que es objeto de investigación.

El que fuera administrador de la empresa hasta el año 2010 y que supuestamente acabó siendo apartado por los demás socios, además de indicar que hubo «caja B», fue a la jueza en su momento para desvelar lo que pasó con la adjudicación, cómo funcionaba la empresa y otra serie de detalles. De esas declaraciones arranca la imputación a la empresa.

Este exsocio de la empresa detalló a la jueza qué personas estaban detrás de Cechalva y cuáles eran sus intereses. Al menos tres de las vinculadas a la misma se encuentran imputadas en la operación.

El primero de los administradores llamado por la jueza ayer se acogió a su derecho de no declarar.

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