LUGO ANTICORRUPCIÓN

LAS DECLARACIONES DEL CASO CARIOCA SE SALDAN CON PROTESTAS Y LA PUESTA EN LIBERTAD DE UN POLICÍA

16/04/2010 - Miguel Olarte + J. M. Freire / El Progreso (Lugo)

Pocas sorpresas y muchas protestas. Como era esperado, la preconstitución en Lugo este viernes de la prueba testifical de seis prostitutas —sólo acudieron cinco— del caso Carioca no arrojó grandes novedades, salvo la puesta en libertad de uno de los encarcelados, el policía nacional F.J.F.B., destinado en el aeropuerto de Barajas y que supuestamente era quien permitía la entrada de chicas brasileñas sin hacerles preguntas comprometidas.

Como también se auguraba, las peticiones de nulidad y las protestas marcaron una sesión que se prolongó desde las once de la mañana hasta las seis de la tarde, sin tiempo apenas de descanso. Ya antes de entrar, al menos dos abogados presentaron nulidades y luego las quejas por la "improcedencia" de las preguntas se multiplicaron en la sala de la Audiencia, que acogió la sesión al no haber espacio suficiente en el juzgado número uno para el casi un centenar de personas presentes, entre imputados, abogados y agentes de Policía que velaban por la seguridad.

Las protestas se dieron casi siempre por el mismo motivo: el freno de la jueza a las preguntas de los letrados defensores. Mientras se les permitieron todas las cuestiones al fiscal jefe y a los abogados de las cin

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co chicas (llevaban letrado ante la posibilidad de personarse como acusación particular) y a otras dos acusaciones presentes en relación al caso de aborto —un tema inédito en estos testimonios—, a los representantes de los imputados la jueza Pilar de Lara les frenó constantemente los interrogatorios, lo que daba lugar a la consiguiente protesta y al típico "que conste en acta". Esto fue la causa de que la prueba se prolongase durante tanto tiempo.

La preconstitución de la prueba es una forma excepcional de adelantar las declaraciones de testigos, ante el riesgo de que se marchen del país al tener fijada su residencia fuera de España. Consiste en recrear esa parte de la prueba testifical, para que tenga validez en una futura vista oral, con la particularidad de que los abogados se rigen por las normas que impone la jueza instructora, no por las del tribunal juzgador, que en este caso será la Audiencia Provincial de Lugo.

A esto hay que añadir que la causa está bajo secreto sumarial, con lo cual las partes tienen limitada la posibilidad de defender a sus clientes, si bien es cierto que el juzgado levantó esta medida con respecto a las diligencias que afectaban a las declaraciones de las seis testigos protegidas, en una medida que la práctica totalidad de los abogados consideraron insuficiente.

Por lo que respecta a las declaraciones, las cinco chicas ratificaron básicamente sus declaraciones ante la instructora del caso, donde revelan cuál era la forma de funcionar de la red de prostitución.