LOS FUNCIONARIOS SE ENCONTRARON UNA MAÑANA CON QUE LAS DILIGENCIAS DESAPARECIERAN
La Voz 4/5/2011
Una mañana, al comienzo de su jornada laboral, los funcionarios que debían trabajar con las diligencias correspondientes a la operación Carioca se encontraron con que éstas no estaban. Por más que intentaran acceder a las mismas, el sistema les informaba que el procedimiento no podía encontrarse.
La sorpresa del personal era mayúscula porque sí era posible acceder al resto de asuntos que tramita el juzgado. La trama de los burdeles había desaparecido .
El problema hizo aflorar una gran preocupación. Algunos trabajadores acudieron al decanato para comprobar si habría sucedido algo extraño. La respuesta fue negativa. Es más, tras otra comprobación, resulta que el procedimiento ni figuraba como existente, ni con el número de diligencias previas, ni con el número de registro general.
Las incidencias informáticas habían comenzado realmente días antes cuando una funcionaria no pudo entrar en un documento de las diligencias. Con posterioridad, el problema fue en aumento porque tampoco era posible registrar nuevos documentos. La preocupante situación fue comunicada al servicio de guardia de informática de la Xunta donde les informaron que el problema no se podía solucionar telefónicamente.
«Se perdió un registro»
La Xunta, a requerimientos de la magistrada, respondió que únicamente se había perdido un registro de la denominada tabla de procedimiento que almacena información como, por ejemplo, el tipo de procedimiento, número, fase, estado, fecha de incoación. De acuerdo con la versión de la Secretaría Xeral de Modernización e Innovación Tecnológica, el modelo relaciona cada uno de los registros con cada uno de los intervinientes y acontecimientos tramitados. «Haber perdido un registro de esta tabla, no implicaba la pérdida de otros datos», destacó la Xunta que reconoció que por el funcionamiento del Minerva, perder este registro impedía entrar en el resto de la información.
La Xunta consideraba que la incidencia era grave, pero la definió como puntual en el funcionamiento de la administración. Confirmó, a su vez, que el sistema no dispone de un registro de auditoría de accesos, pero advertía de que lo instalaría en la primavera pasada..
La Voz 4/5/2011
Una mañana, al comienzo de su jornada laboral, los funcionarios que debían trabajar con las diligencias correspondientes a la operación Carioca se encontraron con que éstas no estaban. Por más que intentaran acceder a las mismas, el sistema les informaba que el procedimiento no podía encontrarse.
La sorpresa del personal era mayúscula porque sí era posible acceder al resto de asuntos que tramita el juzgado. La trama de los burdeles había desaparecido .
El problema hizo aflorar una gran preocupación. Algunos trabajadores acudieron al decanato para comprobar si habría sucedido algo extraño. La respuesta fue negativa. Es más, tras otra comprobación, resulta que el procedimiento ni figuraba como existente, ni con el número de diligencias previas, ni con el número de registro general.
Las incidencias informáticas habían comenzado realmente días antes cuando una funcionaria no pudo entrar en un documento de las diligencias. Con posterioridad, el problema fue en aumento porque tampoco era posible registrar nuevos documentos. La preocupante situación fue comunicada al servicio de guardia de informática de la Xunta donde les informaron que el problema no se podía solucionar telefónicamente.
«Se perdió un registro»
La Xunta, a requerimientos de la magistrada, respondió que únicamente se había perdido un registro de la denominada tabla de procedimiento que almacena información como, por ejemplo, el tipo de procedimiento, número, fase, estado, fecha de incoación. De acuerdo con la versión de la Secretaría Xeral de Modernización e Innovación Tecnológica, el modelo relaciona cada uno de los registros con cada uno de los intervinientes y acontecimientos tramitados. «Haber perdido un registro de esta tabla, no implicaba la pérdida de otros datos», destacó la Xunta que reconoció que por el funcionamiento del Minerva, perder este registro impedía entrar en el resto de la información.
La Xunta consideraba que la incidencia era grave, pero la definió como puntual en el funcionamiento de la administración. Confirmó, a su vez, que el sistema no dispone de un registro de auditoría de accesos, pero advertía de que lo instalaría en la primavera pasada..
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